Miley Cyrus, luego de su último escándalo de la pipa, estuvo casi inubicable pero se hizo ver en la víspera de Año Nuevo preparándose para las celebraciones.
Miley Cyrus estuvo sonriente y de los más amigable, incluso posó para las cámaras y se animó a hacer un gesto de amor y paz a los paparazzis y a sus fans.
Esta salida de la cantante coincide con los rumores de una posible reconciliación de sus padres luego que fueran vistos juntos en un restaurante, ‘Mientras no haya papeles firmados de divorcio y con Miley Cyrus influyendo para que se amisten, todo es posible‘, señaló una fuente cercana a la familia.