A veces sorprende la falsa moral de los norteamericanos, cuya mente perversa y morbosa ve cosas donde no las hay. Miley Cyrus ha sido el último objetivo de la crítica y opinión pública, saltando a los medios informativos por un pole dancing o baile de barra que hizo en el Teen Choice Awards.
El escándalo radica en que la cantante tiene 16 años, por lo tanto es una menor, y en un momento dado se sube a una plataforma en la que hay una barra de esas que usan las streappers. Es aquí cuando las connotaciones y asociaciones de las mentes americanas calenturientas se disparan, pues, como vereis en los vídeos, Miley no hace absolutamente nada más que agarrarse a la barra y agacharse unos segundos, sin contoneos, sin meneos, sin movimientos que indiquen que se está insinuando.
Pero los americanos son así, Britney Spears sí puede cantar el One More Time a sus 17 años vestida de colegiala provocadora pero Miley Cyrus no se puede agarrar a una barra de acero.
El padre de la chiquilla, Billy Ray Cyrus, ha salido en su defensa, alegando que todo lo que hace Miley es en pro de entretener a sus fans, dando siempre todo el amor que siente por lo que hace.